Ángel López García Universidad de Valencia www.uv.es/=alopez/
Las caracterizaciones globales de una lengua tienen siempre algo de superficial y apresurado. Decir que el alemán es un idioma "analítico" por contraposición al francés que sería más bien "sintético", en el fondo no es decir nada: el propio Ch. Bally, quien propugnó esta oposición en su libro El lenguaje y la vida (Buenos Aires, Losada, 1941), reconoce las constantes violaciones de esta formulación originaria conducentes a la postre al reconocimiento, nada revelador, de que ambos idiomas son "analíticos y sintéticos al mismo tiempo". Cuando de los
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