La introducción y expansión de las Nuevas Tecnologias de Comunicación en América Latina presenta peculiaridades importantes. Este articulo se pregunta por sus razones y resultados y concluye la necesidad de una ciencia y unas tecnologias autónomas.
A veces resulta entretenido observar que los inventos han servido para cosas muy distintas de las que el poder de su época deseaba hacer con ellos: así ocurre con la imprenta, imaginada por Carlos V como una forma de divulgar el latín y que luego significó la decadencia del emperador. Como usted ve, la ciencia ha de contar con la aptitud de los hombres para integrarla a lo cotidiano. Por eso es importante saber cómo se inscribe una tecnología en la sociedad, los casos en que sirve para el desarrollo de ésta, los casos en los que la perjudica y los casos en que no resuelve nada” (1).
La cita anterior nos proporciona un punto de partida inmejorable para iniciar una reflexión acerca de lo que significan las nuevas tecnologías de comunicación para la región latinoamericana ‑desde México hasta el extremo sur del continente, incluyendo al Caribe. Así tenemos que ver, de un lado, la situación económica y social en que se encuentra hoy, 1989, América Latina, y del otro, la situación global de la infraestructura de telecomunicaciones de los países que la integran, sus usos y tendencias hacia los próximos años.
Durante las décadas de los cincuenta y sesenta se publicitó el “slogan” de “comunicación para el desarrollo”, no sólo en América Latina sino también en el resto de regiones subdesarrolladas. De esa manera, se intentó hacernos creer que con fuertes inversiones en infraestructura de telecomunicaciones, la población alcanzaría los niveles de desarrollo establecidos desde las sociedades económicamente avanzadas.
El discurso modernizador de los años ochenta no ha cambiado en lo sustancial. La informatización de las sociedades latinoamericanas, es decir, la incorporación de las nuevas tecnologías de comunicación e información en todos los ámbitos de la vida social, se nos ha presentado como la única alternativa viable para alcanzar ese crecimiento. A mayor número de computadoras, cables de fibra óptica, satélites, bancos de datos y redes digitales integrales, mayor grado de modernización alcanzaremos. Sin embargo, los problemas estructurales de América Latina se acrecientan en vez de solucionarse, a pesar de la nueva tecnología.
|