El Congreso Mundial de Sociología que tiene lugar en España durante los días 9 a 13 de julio de 1990 se celebra bajo un lema que no puede ser más significativo para cuantos se dedican al cultivo o al estudio de las técnicas y procesos comunicativos en el universo contemporáneo: «Sociología para un solo mundo: unidad y diversidad». Ningún otro factor ha influido tanto como los medios técnicos de comunicación, información y procesamiento de símbolos y datos en la forja de un mundo como el nuestro, a la vez diverso y único. Ninguna otra fuerza, política, económica o cultural potencia hoy con mayor intensidad que tales medios la creación de una sociedad humana interdependiente, integrada e indivisible, es decir, la gestación de un solo mundo.
El origen y el progreso de la sociología han ido parejos a los de las ciencias y técnicas de la comunicación. Una y otras son componentes esenciales de la misma civilización emergente, de un mismo mundo nuevo. Desde sus respectivos comienzos han estado vinculadas entre sí por el diálogo y la mutua fertilización. No han padecido los estragos que fomenta la desconfianza entre prácticas y disciplinas que se necesitan entre sí sin reconocerlo. Hoy, además, la sociología es, por excelencia, la con ciencia crítica y reflexiva de los medios técnicos de comunicación, así como la de sus efectos sobre nuestra vida moral y la estructura de nuestra sociedad. La interpretación de la transformación del mundo humano por los medios y técnicas comunicativas es, en esencia, sociológica. Por otra parte, el modelo de homo communicans sobre el que operan los medios técnicos de hoy es, en gran medida, una faceta del homo sociologicus, redefinido en la modernidad avanzada por esos mismos medios.