Emili
Prado
La "vieja" radio da muestras de gran vitalidad. Su asimilación de las innovaciones tecnológicas en el ámbito de la difusión y de la producción puede prestarle un nuevo impulso.
La radio ha demostrado su capacidad de adaptación al contexto social
y tecnológico de cada momento a lo largo de su historia. Las innovaciones más
espectaculares registradas en los últimos años en el campo de las tecnologías
de la comunicación, pese a tener poca relación con la radio aparentemente, han
potenciado a este medio que sabe tomar de cada una de ellas los elementos que
le permiten mejorar sus funciones tradicionales como medio de comunicación de
masas e introducirse en nuevos campos para suministrar nuevos servicios.
Las innovaciones tecnológicas más destacables afectan a dos ámbitos:
1) la alta frecuencia (equipos de emisión) y 2) la baja frecuencia (equipos de
producción) que ya analizamos en otro trabajo publicado anteriormente al cual
les remitimos (TELOS n.° 5, enero‑marzo de 1986).
En lo referente a los equipos de emisión, las tendencias que apuntábamos se han consolidado en los dos años trascurridos desde entonces y las mejoras en la calidad de sonido, el alcance de la transmisión, el número de canales disponibles, etc., son un hecho, imponiéndose progresivamente el uso de los satélites para la radiodifusión, no sólo en los Estados Unidos, sino en Europa, incrementándose también la distribución de señales radiofónicas por las redes de cable.
Por otro lado siguen los trabajos de europeos y japoneses a la
búsqueda de un sistema de radiodifusión,numérica con un nivel de calidad
sonora equiparable a la de los discos compactos de lectura por rayo láser, lo
que mejorará notablemente los estándares de calidad existente en la FM y en las
transmisiones por satélite.
Otras innovaciones en este ámbito permiten a la radio ensayar nuevos
servicios más especializados y/o complementarios a los más tradicionales. Es
el caso de la isofrecuencia,
que permite sintonizar en Onda Media un
programa especializado gracias a un cable de fibra óptica y una serie de
repetidores. Este sistema ha sido experimentado en Italia en la red de
autopistas, y permite la transmisión de un programa especial para los
automovilistas. Estos programas denominados Viajar con seguridad están
compuestos por los programas informativos de la RAI 1 y 2 y pueden ser
interrumpidos para dar informaciones inmediatas sobre el tráfico, las
condiciones de la calzada, las circunstancias meteorológicas, las salidas
recomendables, o cualquier otra información de interés para los conductores.
Por otra parte se están realizando interesantes experiencias de Radio‑Software cuya potencialidad no ha sido totalmente explotada. En esencia, se trata
de aprovechar las emisiones de FM para transmitir contemporáneamente ai mensaje
auditivo datos software no detectables por el oído y sin que produzcan la menor
distorsión. El software se añade a la señal FM mediante un reformador de
datos ubicado entre el emisor y la antena. Estos datos están al alcance de
cualquier receptor, basta con que el interesado grabe la emisión en un
cassette y luego lo utilice en su microordenador.
Este sistema, además de potenciar la alfabetización informática,
estimular la creación de programas y posibilitar su socialización, abre nuevas
posibilidades para el medio radiofónico. La transmisión de software por radio
permite también el envío de textos, gráficos o documentos que pueden
materializarse en soporte impreso. Tales textos pueden tener relación o no con
el programa radiofónico emitido en ese momento. Se abre así la posibilidad de
hacer llegar a los interesados el texto íntegro del guión del pro grama que
sintonizan, un cuadro estadístico con los datos más destacados del tema tratado,
el contenido de unas declaraciones o la biografía de un personaje.
Las posibilidades del sistema abren interesantes expectativas
especialmente en el campo informativo, pero relanzan las posibilidades de la
radio en el terreno educativo. Cierto que la dominante de su utilización hasta
el momento ha sido el campo informático y tales experiencias ya han tenido su
edición en España siendo pionera Radio 4, el cuarto canal de RNE en Catalunya.
INNOVACIONES
‑EN LA PRODUCCIóN
A caballo entre las innovaciones referentes a los equipos de emisión y los de producción se encuentra la radio celular, que está registrando un notable incremento en su implantación en nuestro continente. Sirva como ejemplo el caso británico, que cuenta con dos redes, la CELLNET y la VODAFONE, ambas con una cobertura que alcanza al 80 por ciento de la población. En nuestro país este servicio está registrando también un notable incremento. Naturalmente la radio celular no está pensada para una función de radiodifusión, sino para la radiotelefonía; pero el tradicional maridaje entre el teléfono y la radio hace que su servicio a la radiodifusión potencie las ya elevadas posibilidades de movilidad del medio, las conexiones desde lugares poco accesibles para otros equipos tradicionales y la multiplicación de las posibilidades interactivas.
En el campo cde los equipos de producción también se
consolidan las tendencias apuntadas en el artículo citado (TELOS n.° 5). Tras
referir los avances registrados en el campo de los equipos analógicos
tendentes a mejorar la calidad y fidelidad de la señal y las posibilidades de
manipulación de la misma que permiten la creación de sensaciones sonoras
subjetivas que incrementan la capacidad creativa del medio, señalábamos que las
proporciones del cambio serían más espectaculares si nos referíamos a los
equipos digitales y constatábamos su reclusión en el uso de las grabaciones
musicales. Pues bien, hoy los magnetófonos digitales ya son una realidad y su
incorporación a la cadena productiva ofrece grandes posibilidades.
Estos equipos ponen a nuestro alcance grabaciones de 1.000 minutos de
audio Hifi, permitiendo el acceso inmediato, manipulaciones, regrabaciones,
insertos, copias con pérdidas de calidad 0, etc. Además, la comercialización
del cassette digital supone una revolución, si cabe mayor, para la
socialización de este tipo de equipos en la producción radiofónica de todos los
ámbitos.
La creatividad radiofónica y la eficacia comunicativa del medio
radican en la manipulación técnica de la señal. Cuando ésta es analógica, al
ser manipulada (amplificada, transferida, ralentizada, etc.) sufre un aumento
de ruido que ya pasará a integrar la
señal y será prácticamente inseparable de ella. Una señal digital también lo
adquiere pero no la afecta, ya que puede ser restituida sin el ruido fruto de la manipulación.
Por lo demás, la aplicación de la informática a los equipos de
producción tiene consecuencias no sólo en el campo del sonido sintético, sino
en los equipos destinados a la configuración de sistemas modulares programables
capaces de controlar y gestionar el sistema en tiempo real combinando todo tipo
de fuentes sonoras. Facilita además el acceso a la información y los documentos
sonoros almacenados, potenciando su uso, con la consiguiente mejora de la
producción.
El conjunto de innovaciones referenciadas son las armas con las que la
radio afronta la batalla por la supervivencia.
OPCIONES
FRENTE A LA TELEVISIÓN
La reubicación de los medios en el ecosistema comunicativo que se
está configurando merced a las nuevas tecnologías sigue una tendencia que aun
siendo incipiente ya revela sus primeras indicaciones. La televisión apuesta
fundamentalmente por la espectacularidad y el entretenimiento. Los avances
tecnológicos y la dominante ideológica del libre mercado están
dinamitando los últimos
resquicios del monopolio televisivo. En el nuevo marco de competencia que
impone la privatización la apuesta de los programadores se vuelca en la
diversión en perjuicio de otros contenidos. Como pone de relieve un estudio
efectuado por Horizons Media International sobre las programaciones europeas,
la principal tendencia de las cadenas privadas ha sido hacia una programación más
divertida. Pero los efectos de esta situación
afectan también a las televisiones públicas de los países que todavía no
disponen de televisión privada y según el mismo estudio los canales de esos
países pasaron de un 43% de
programación de entretenimiento en 1985 a un 46% en
1986. El incremento parece
sensiblemente superior en la actualidad.
Esta opción programática de la televisión deja a la radio en
disposición de volcar definitivamente su apuesta diferenciadora en la información
de actualidad y para ello cuenta con la concurrencia de un amplio conjunto de
innovaciones tecnológicas, especialmente la informática redaccional, que
potencian sus ya tradicionales características tecnológicas como medio de
información.
La información radiofónica no debe ni puede en las actuales
circunstancias de competencia derivadas de proliferación de emisoras y de la
creciente competencia de los "nuevos medios" limitarse al recitado de
los despachos de las agencias de información ni al suministro de un
"continuum" de hechos en bruto. En la elaboración del
producto se le deben añadir una serie de valores tanto de carácter estético
como de contenido. A unos y otros concurren las nuevas tecnologías a
disposición del radiofonista, del periodista.
Al margen de los recursos propios dé cada periodista, tales como la
especialización en un campo temático, su capacidad de indagación, su archivo
particular, la agenda, etc,, hoy en día cuenta con una serie de fondos de
consulta facilitados por la aplicación de la informática a las redacciones
radiofónicas cuyo uso posibilita la inclusión de un valor añadido a
las informaciones difundidas.
La redacción radiofónica informatizada permite al periodista disponer
en su terminal de trabajo de los despachos de las diversas agencias a que esté
abonada la emisora, no sólo almacenados cronológicamente, sino debidamente
clasificados conforme a los criterios preestablecidos por el propio
periodista, de lo que se deriva un ahorro de tiempo de producción que favorece
la adaptación a las exigencias de celeridad propias del medio, pero también
libera tiempo que el periodista puede destinar a la profundización de los temas
o el establecimiento de una mejor estrategia de presentación que redunde en la
eficacia comunicativa del producto.
Discos de bases de datos internas que deben sustituir los "viejos
archivos" cuya falta de versatilidad, facilidad de acceso y ausencia de
alimentación sistemática los convertía en poco más que un almacén de recortes
impracticable. Estas bases de datos tienen una naturaleza y unos contenidos
definidos en función de las características de los servicios exigibles, y
éstos a su vez están determinados por los formatos de programación de cada
estación.
Cuenta también con unas posibilidades de acceso a bases de datos
externas al propio medio que hoy proliferan, especializadas en una amplia gama
de contenidos, de forma que puede acceder a una serie de informaciones que en
las tradicionales condiciones del sistema de producción radiofónico eran
inalcanzables en la práctica.
Tiene acceso también a las bases de datos documentales internas y
externas que le permiten disponer de documentos sonoros de todo tipo y en toda
clase de soportes, con lo que se enriquece el contenido pero también la forma
de los mensajes.
Es evidente que todos estos elementos potencian aún más las ya de por
sí extraordinarias cualidades de la radio como medio de información de
actualidad y configura este campo temático y el musical como las dos armas
eficaces para brillar con luz propia en la constelación de la comunicación
potenciada por las viejas y las nuevas tecnologías.
Con todos estos aportes, la "vieja" radio da muestras de una
salud inquebrantable, sea por el constante incremento del número de emisoras,
sea por el aumento de las horas de programación, sea por el aumento de las
audiencias, o por el incremento de la porción del pastel publicitario.
Una buena muestra de ese crecimiento es el caso alemán; el que
podríamos denominar el "último reducto del monopolio radiofónico" ha
dado paso a la privatización, con lo que las 40 emisoras públicas existentes en
la RFA cuentan con la compañía de 170 emisoras de radio privada en FM. Y en 1987
la radio fue el medio que obtuvo mayor éxito del
balance publicitario.
En Francia, el Estudio anual de publicidad del IREP revela una
tendencia de incremento de la porción de pastel publicitario obtenido por la
radio de dos puntos superior al alcanzado por su inmediata competidor a la TV y
siete por encima de los diarios nacionales.
La generalización del uso de los satélites para la radio en los EE.UU.
ha dado como consecuencia un progresivo aumento de las cadenas que ya ha
tenido su traducción en el terreno de la publicidad; según se desprende de un
estudio encargado por un grupo de emisoras en 1987 las inversiones
publicitarias en el medio han registrado un incremento del 31 por ciento.
En Italia el crecimiento de la audiencia en los últimos años ha sido
continuada, y el incremento de la inversión publicitaria una consecuencia
inmediata.
En nuestro país según los datos del Estudio General de Medios la radio
registra el mayor incremento de audiencia en los últimos diez años respecto al
conjunto de los medios de comunicación de masas, y ello pese al incremento de
la oferta televisiva registrada en los últimos tiempos. Asimismo la inversión
publicitaria sigue marcando índices de crecimiento.