CONTRIBUCIONES DE LA CREATIVIDAD EN LA FORMACIÓN DE DOCENTES .

 

Mario Ramos Carmona.

 

Las contribuciones de la creatividad en la formación de docentes pueden ser tan sustanciales como los procesos de investigación, es decir, que el perfil creativo puede ser tan importante como el perfil del profesor-investigador profesor profesional reflexivo (Donald Shön). Así, la creatividad tiene mucho que aportar, tanto como la investigación–acción, la tecnología, la didáctica crítica y otras corrientes que han imperado en los procesos de formación docente.

Enseguida se da cuenta de algunas experiencias de formación que se han venido dando en los últimos 20 años en el estado de Jalisco, en las cuales el autor del presente trabajo ha participado, diseñado y operado.

 

 

Taller de creatividad en la educación

 

En octubre de 1980 y noviembre de 1981, se desarrolló un curso de Creatividad en la educación en la ciudad de México a cargo de la señora Susana Alexander y la doctora Hillary Bool, de la Universidad de Cardiff; el taller consistió en la realización de actividades lúdicas, dramáticas y artísticas para la estimulación de la creatividad.

La propuesta de Creatividad en la educación consistía en la estimulación y desarrollo de la imaginación del docente mediante la realización de juegos de imaginación, improvisaciones y acciones retomadas del drama. Originalmente el método fue llamado por la doctora Bool, Drama in Education.

Las ampliaciones que la señora Alexander realizó, así como las adaptaciones de los instructores, transformaron un poco el método. Así, el método de Creatividad en la educación incluía los siguientes aspectos:

 

· Desarrollo de la creatividad mediante el movimiento y la expresión corporal.

· Desarrollo de la creatividad por medio del drama y sus técnicas, como el juego dramático, juegos de fantasía, improvisaciones.

· Desarrollo de la creatividad mediante algunas técnicas de las artes plásticas, como el collage o la dactilopintura.

 

En una segunda dimensión se proponía este método para el aprendizaje de otras materias del currículum de la educación primaria y secundaria.

Este taller fue luego multiplicado por parte de instructores capacitados, en toda la República Mexicana.

El método de Creatividad en la educación recurría al espíritu lúdico de los participantes y se desarrollaba en tres fases:

 

· Fase de integración grupal.

· Fase de sensibilización.

· Fase de estimulación y desarrollo de las capacidades creativas.

· Fase de aplicación de técnicas creativas en la enseñanza–aprendizaje de asignaturas escolares.

 

 

Creatividad en la educación se trabajó principalmente con estudiantes normalistas, dotándolos de elementos metodológicos que enriquecían su práctica educativa. Las sesiones de creatividad eran una fiesta donde se bailaba, se pintaba y se actuaba construyendo alrededor de un centro de interés. En las aulas de creatividad los alumnos se disfrazaban originalmente, creaban coros y estribillos ingeniosos y desarrollaban actuaciones frescas y creativas. Las mediaciones podían ser un cuadro de Goya o Rubens personificado por los alumnos que le daban vida y significado en una improvisación; o una canción que se convertía en una narración que marcaba las acciones de los alumnos.

 

Creatividad en la educación inducía acciones participativas de los alumnos, construcción de significados a partir de los saberes y conocimientos personales, compromiso en la acción; pero sobre todo, Creatividad en la educación planteaba el reto de un profesor cualitativamente diferente, un profesor–animador que dinamizara la clase, la volviera una fiesta donde todos aprendieran de todos, donde todos construyeran significados, donde todos se expresaran de formas originales y creativas. Un profesor–animador de las expresiones creativas y humanas, del desarrollo de las potencialidades creativas.

Al grupo de egresados de los cedart (Centros de Educación Artística dependientes del inba y de la sep) que participamos, esta propuesta nos dejó experiencias educativas y humanas fundamentales.

 

 

Hacia un modelo de educación creativa en preescolar

 

De 1981 a 1985 desarrollé una investigación experimental con educadoras de la zona 08 a cargo de la supervisora Ana Rosa Arzate Jacobo, siendo directora de Educación Preescolar la maestra María Trinidad Martínez Yáñez. La propuesta estaba constituida por elementos metodológicos de creatividad en la educación, expresión y comunicación, psicomotricidad, artes plásticas, gimnasia rítmica y medios impresos de bajo costo: mimeógrafo y gelatógrafo.

Se realizaron talleres de Hacia un modelo de educación creativa con las educadoras y con algunas voluntarias se planteó el proyecto de llevarlo al aula.

Así, las educadoras aprendían métodos y técnicas creativas y algunas lo aplicaban sistemáticamente en el jardín de niños. De esta experiencia de formación recuerdo el entusiasmo y motivación de las educadoras, y cómo ellas innovaban su práctica docente con nuestras técnicas, algunas de las cuales eran creadas por ellas; los niños también creaban secuencias en algunos ejercicios de expresión corporal.

El proyecto hacía hincapié en el uso de técnicas creativas en el jardín de niños que enriquecieran los recursos metodológicos de la educadora, y que contribuyeran al desarrollo del pep 81 con mediaciones creativas. Suponía la presencia de educadoras con perfil creativo, lúdico y reflexivo, que conocieran los elementos metodológicos de la creatividad, la psicomotricidad, la expresión corporal, etcétera, y estuvieran dispuestas a operarlos en el aula.

El proyecto estuvo básicamente organizado alrededor de talleres con educadoras y talleres con niños, en los que las educadoras observaban el desarrollo de la sesión y tomaban datos, algo parecido a la micro enseñanza.

La concepción pedagógica de Hacia un modelo de educación creativa se fundamentaba en el aprendizaje vivencial, exigía el uso de material creativo que desarrollaba diferentes posibilidades y planteaba una función de facilitador y animador al profesor que no "enseñaba" en el sentido tradicional de la palabra, sino propiciaba la construcción del conocimiento por el mismo niño.

Por último, diremos que los principios que buscaba desarrollar la concepción pedagógica creativa, mediante la práctica docente, se centran en las siguientes premisas:

 

Autonomía: indica que se estimula la capacidad de decisión e independencia psicológica del niño, respecto de otros elementos externos a él.

 

Actividad: plantea la participación activa del niño en todo el proceso de enseñanza–aprendizaje.

 

Libertad: señala la capacidad de elección, de discrepancia, de voluntad, de participación y de iniciativa para el desarrollo del trabajo a partir de sus intereses y necesidades.

 

Vivencialidad: manifiesta el tipo de aprendizaje significativo de aprender haciendo, como alumno de este proyecto educativo.

 

Ludismo: significa el pleno respeto y utilización de la posibilidad de jugar y aprender a través del juego del niño.

 

Individualidad: denota la estimulación del desarrollo de las características personales del niño, las que lo diferencian de los demás y le permiten ser él mismo.

 

Comunitariedad: plantea la necesidad y el deber de crecer juntos a través de un proceso que estimule la vida en común para resolver problemas, avanzar, crecer, llegar juntos.

 

Creatividad: promover el desarrollo de la imaginación del niño, lo que le permitirá desarrollar a su vez los rasgos psicológicos propios de una persona creativa.

 

Desarrollo de las estructuras cognoscitivas: plantea el desarrollo de las estructuras cognoscitivas a través del proceso educativo como una forma de generar una educación integral.

 

Hacia un modelo de educación creativa en preescolar fue un proyecto cuyos resultados se publicaron en 1985, teniendo una buena recepción por parte de profesores de todo el país. Actualmente está en prensa la segunda edición.

 

 

Procesos creativos en el aula

 

Posteriormente se realizó un proyecto de investigación financiado por conacyt, el cual pretendía conocer y analizar los procesos creativos que se desarrollaban en el aula. Para el desarrollo de esta investigación se visitaron seis escuelas secundarias del medio urbano, suburbano y rural.

Después del trabajo de campo se analizaron registros, cuestionarios y se caracterizó la práctica educativa.

En el proceso de caracterización de la práctica educativa se encontró que había pocas mediaciones y contenidos que promovían los procesos creativos en el aula. Es decir que en muchos casos de profesores observados las experiencias creativas que se podían suceder en el aula no se daban (36 maestros en total).

Así, en las sesiones de matemáticas, ciencias naturales, ciencias sociales y español de las escuelas visitadas, casi no encontramos procesos creativos. Los procesos de enseñanza que se generaban ahí se podrían caracterizar como expositivos, ya que el profesor explicaba una serie de conocimientos sobre la asignatura mientras el alumno escuchaba, tomaba apuntes y al final de la exposición se ponía a contestar el libro de trabajo, o hacía ejercicios que el profesor escribía en el pizarrón.

Sin embargo, en la asignatura de español, fueron identificados algunos rasgos creativos como actuar una obra de teatro o teatralizar un cuento, contar o escribir poemas y leyendas, experiencias en las que estuvo presente la imaginación creativa de los adolescentes. En pocos momentos de las otras asignaturas también se pudieron ver procesos de pensamiento analógico, ejercicios de imaginación, como qué sucedería si pasara esto o aquello; en otras materias se inventaban artefactos, como en alguna clase de ciencias naturales donde se creaban estructuras con base en imanes o cables.

Esta situación nos motivó a diseñar un "Taller para el desarrollo de los procesos creativos".

Este taller se propuso dotar de mediaciones creativas a los profesores para que estos promovieran los procesos creativos en el aula.

Las fases que marcaban el avance del grupo tallerista se estructuraron en tres momentos:

 

Conocimiento de la propia práctica educativa. Este momento hacía énfasis en un análisis de la propia práctica, a partir de la autobservación y autoregistro.

 

Introducción de elementos creativos en la estructura de la práctica. Con el conocimiento de la estructura y la organización de acciones cotidianas de la práctica educativa, se intentaba que los propios docentes buscaran formas de operar creativamente algún segmento de la estructura.

 

Intervención de la práctica para el desarrollo de la creatividad. Con una visión de la práctica docente transformada se intentaba que los talleristas, todos ellos profesores en servicio, operaran la práctica docente con un estilo de enseñanza creativo, que suponía:

 

· Una clase en la que el diálogo era parte sustancial del proceso de enseñanza.

· Una clase que operaba con la pedagogía de la pregunta y no de la respuesta; es decir, que intentaba provocar, poner a pensar e indagar al alumno, antes que "depositarle" saberes y conocimientos.

· Una clase constructivista, es decir, una clase donde el alumno tuviera la oportunidad de indagar, de hacer, de construir desde su perspectiva. De indagar y construir saberes, conocimientos, hechos, situaciones, objetos y expresiones.

· Un profesor reflexivo que pensara su práctica docente y la transformara continuamente.

· Un profesor que sistematizara su práctica docente, es decir, que registrara, analizara, interpretara y estableciera permanentemente acciones de innovación.

· Un profesor que propiciara el desarrollo del pensamiento creativo.

 

En este taller fueron madurando algunos elementos para el desarrollo de modelos para la intervención e innovación de la práctica docente, que se concretaron en el Diplomado de Dirección Escolar y Desarrollo Institucional, dirigido a directores de educación secundaria, con el propósito de que conocieran, analizaran y transformaran sus prácticas directivas y las pudieran concretar en un proyecto institucional participativo. Por otra parte, se ha trabajado con el Diplomado en Expresión, Creatividad y Psicomotricidad, realizado en la eneg, y con la Maestría en Educación con Intervención en la Práctica Docente que la Secretaría de Educación del Estado de Jalisco echó a andar en 1994.

 

 

Diplomado en Expresión, Creatividad y Psicomotricidad

 

El diplomado se organizó en seis módulos que se ubican en la ruta metodológica del análisis de la práctica docente, significación de la práctica, enriquecimiento de la experiencia previa de la formación, ensayo de alternativas, transformación e innovación educativa. Los módulos fueron:

 

· Análisis de la práctica educativa

· Creatividad en la educación preescolar

· Expresión y comunicación

· Psicomotricidad

· Habilidades del pensamiento

· Innovación de las prácticas educativas

 

Por medio de los seis módulos se van generando procesos educativos que siguen la ruta metodológica de la intervención y además en cada módulo se van aportando, descubriendo y generando elementos teóricos, metodológicos y acciones de intervención en segmentos y momentos micro de la práctica.

Así, cada módulo incluye método, teoría y acción interventora en un nivel micro. La experiencia recuperada en la puesta en marcha del Diplomado en Expresión, Creatividad y Psicomotricidad indica que los procesos que se generaron impactaron en la práctica, lograron transformaciones de diferentes dimensiones, desde cambios en la secuencia didáctica o estructura de la clase, o en los formatos instruccionales utilizados, hasta el diseño y realización de proyectos educativos para el aula o para la institución.

Se recorrió la ruta del análisis, la significación, el enriquecimiento de la experiencia previa, el ensayo de alternativas, las transformaciones e innovaciones; los asistentes vivenciaron significativamente este proceso construyendo grandes cosas, reflexionando y entendiendo la lógica de sus acciones en el aula, mejorando su quehacer y en algunos casos diseñando propuestas de innovación en el aula.

Los propósitos del diplomado fueron los de estimular el análisis, comprensión y procesos de transformación de las prácticas docentes en el jardín de niños; los propósitos se lograron y los resultados indican que las licenciadas en educación preescolar egresadas de la eneg, y en general las educadoras en servicio, pueden y necesitan enriquecer y transformar sus prácticas.

En general, se enriqueció la experiencia previa de las asistentes y se ensayó con las alternativas que se plantearon en los módulos de creatividad, expresión, psicomotricidad y desarrollo de habilidades del pensamiento y se diseñaron algunas propuestas originales de innovación educativa. De este modo, después de cursar el diplomado, las asistentes lograron, en diferentes dimensiones, cubrir los aspectos que a continuación se describen:

- Tomar conciencia del modelo o forma de hacer las cosas en su práctica como docente, directivo o supervisora.

- Conocimiento, análisis e interpretación de los componentes fundamentales de su práctica, es decir, de las estructuras de la lección, formatos instruccionales con que operan, contenidos de aprendizaje, productos de los procesos generados en el aula.

- Ensayos y tentativas de intervención e innovación educativa; registros y análisis de esas expectativas en ensayo.

- Desarrollo de una propuesta de innovación educativa e intervención de la práctica.

- Aplicación, en su espacio de trabajo, de la propuesta de innovación intervención.

- Evaluación y retroalimentación de la propuesta de innovación–intervención en encuentros con el grupo de asesores del diplomado.

 

 

Conclusiones

 

Los aportes de la creatividad en la formación de profesores han sido importantes en lo cualitativo, no tanto en lo cuantitativo, pues el número de profesores que ha estado en contacto con estas experiencias narradas ha sido pequeño en relación con el número de profesores del sistema educativo jalisciense. Así pues, las contribuciones de la creatividad en la formación de docentes se pueden plantear en tres dimensiones:

 

Dimensión de los rasgos personales: la práctica de la creatividad como actividad lúdica, artística y de creación intelectual, estimula al docente a ser productivo y crítico con su práctica educativa, a desarrollar la empatía y el carisma con sus alumnos, a ser tolerante con las conductas y comprensivo con las nuevas ideas de los alumnos. Además, el profesor que ha tenido un significativo entrenamiento en creatividad es más abierto a las innovaciones y está constantemente experimentando nuevos métodos o consolidando algunos que lo han convencido de sus bondades pedagógicas. Es reflexivo y humano en la relación educativa, promueve el pensamiento autónomo de sus estudiantes, es alegre y optimista, la visión que tiene del mundo es muy original y profunda.

 

Dimensión de la práctica educativa del profesor creativo: la clase es un espacio de creación, de experimentación, de búsqueda y de hallazgos fascinantes. Por diversas mediaciones en una asignatura u otra o en un nivel u otro, encontraremos una práctica que promueve la expresión humana y artística, el juego, la creación intelectual, el desarrollo de ideas y pensamientos propios, el desarrollo de la persona y sus potencialidades en todos los aspectos. La práctica es un encuentro para la creación y la producción, para el ensayo de nuevas posibilidades y alternativas, para la producción de ideas, para el conocimiento y entendimiento de la realidad y para el autoconocimiento.

 

Dimensión institucional: las contribuciones de la creatividad en la dimensión institucional también son esenciales para mantener un perfíl humanista y no tecnócrata en las instituciones formadoras de docentes, para promover la innovación constante del sistema educativo a las nuevas realidades de la vida contemporánea; contribuye a mantener un currículum que tenga algo que decir al mundo de las emociones y los afectos, al aspecto subjetivo del sujeto en formación, y a destacar el aspecto estético de la enseñanza.

 

 

Bibliografía

 

Aymerich, Carmen y María, La expresión medio de desarrollo, Navidad, Barcelona, 1984.

Ramos Carmona, Mario, Hacia un modelo de educación creativa en preescolar, mimeo., Guadalajara, 1985.

Procesos creativos en el aula de secundarias, mimeo., Guadalajara, 1996.

Vygotski, Lev S., Imaginación y arte en la infancia, Letras Hispánicas, México, 1990.

 

Artículo publicado en la revista Educar

Número 10 Creatividad y Educación

http://www.jalisco.gob.mx/srias/educacion/consulta/educar/dirrseed.html